Ethereum (ETH) se recupera tras un período de pérdidas para los inversores a largo plazo. ¿Es el momento de comprar antes de un posible despegue? Análisis detallado de las tendencias actuales. ¡Descúbrelo aquí!
Ethereum (ETH), la segunda criptomoneda más grande por capitalización de mercado, se encuentra en una fase crucial. Tras una presión bajista prolongada que ha llevado el precio a niveles clave de soporte, los indicadores sugieren una posible oportunidad de compra. Con los holders a largo plazo entrando en territorio de capitulación y señales de acumulación emergentes, analicemos si es el momento de posicionarse en ETH.
En primer lugar, los datos on-chain indican que los holders a largo plazo de Ethereum han entrado en fase de capitulación, una situación marcada por pérdidas crecientes. El indicador Long-Term Holder Net Unrealized Profit/Loss (LTH-NUPL) ha pasado al rojo, un fenómeno raro que a menudo refleja el final de un ciclo bajista.
Esta capitulación indica que incluso los inversores más pacientes están experimentando pérdidas, creando un ambiente de “dolor máximo” propicio para los cambios de tendencia en el mercado.
Al mismo tiempo, la diferencia Long/Short del Market Value to Realized Value (MVRV) ha caído a -22 %, un nivel históricamente asociado con pisos de precios. Esta señal sugiere que ETH está subvaluado en comparación con su valor realizado, ofreciendo un punto de entrada atractivo para compradores informados.
La actividad de las ballenas añade una capa de complejidad. Más de 530,000 ETH han cambiado de manos entre grandes poseedores durante la última semana, un volumen que puede indicar una acumulación estratégica o una redistribución. Un ejemplo llamativo es el de una ballena activa desde 2016, que recientemente vendió 10,702 ETH a $1,576.
Esta venta, realizada durante una corrección significativa, podría tener como objetivo provocar pánico entre los pequeños poseedores, preparando el terreno para un repunte. Y las ballenas parecen estar acumulando silenciosamente en las últimas semanas.
No obstante, el aumento de las direcciones activas en la red Ethereum, a pesar de la debilidad de los precios, evidencia un interés sostenido en el ecosistema. Esta resiliencia sugiere que los fundamentos continúan sólidos, incluso frente a la volatilidad.
Desde el punto de vista técnico, ETH ha estado operando en un canal descendente desde noviembre de 2024, caracterizado por máximos y mínimos cada vez más bajos. Tras un fuerte rebote desde el soporte de $1,460, el precio actualmente prueba una resistencia alrededor de los $1,815. Una ruptura de este nivel podría cambiar la estructura del mercado a alcista, abriendo el camino a una prueba de la resistencia superior del canal, cerca de los $2,000.
Por el contrario, un rechazo en $1,815 podría llevar a ETH de vuelta al soporte de $1,460, prolongando la consolidación. Los indicadores de momentum, como el Relative Strength Index (RSI), muestran una divergencia alcista incipiente, lo que sugiere que la presión vendedora está disminuyendo. Una mayor volatilidad, anticipada por las bandas de Bollinger, podría pronto determinar la dirección.
Pero el mercado cripto sigue influenciado por Bitcoin, cuya reciente debilidad impacta en altcoins como ETH. Un repunte de BTC podría catalizar un movimiento alcista para Ethereum. Además, los fundamentos de Ethereum siguen siendo un pilar de confianza. Con su papel central en las finanzas descentralizadas (DeFi), los NFT y las aplicaciones descentralizadas (dApps), la red continúa atrayendo a desarrolladores y usuarios.
La creciente adopción de soluciones de capa 2, que mejoran la escalabilidad y reducen las tarifas, refuerza la posición de Ethereum frente a la competencia. Las próximas actualizaciones, como Pectra en 2025, prometen optimizar aún más el rendimiento de la red, un factor que podría atraer a inversores institucionales.
A corto plazo, Ethereum se encuentra en una zona con un alto potencial de reversión. La capitulación de los holders, combinada con un MVRV que señala una subvaloración y una actividad de red sólida, crea un entorno propicio para la acumulación.
Sin embargo, la resistencia en los $1,815 sigue siendo un obstáculo clave. Una ruptura clara, respaldada por un volumen de compra sólido, podría impulsar a ETH hacia los $2,000 o incluso más allá.
En caso de persistir un mercado bajista, ETH podría dirigirse hacia los $1100 o incluso más bajo a $890. Volver por debajo de los $1000 sería una oportunidad que hasta hace unas semanas era impensable. ¿Entonces, estamos presenciando el inicio del fin o acercándonos a un rebote significativo para Ethereum?
Para los inversores cautelosos, esperar una confirmación alcista por encima de los $1,815 puede reducir los riesgos. A largo plazo, los fundamentos de Ethereum y su continua adopción abogan por una trayectoria alcista, especialmente si el mercado global recupera un impulso alcista. Convirtiendo una caída en una rara oportunidad a largo plazo.
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Charles Ledoux es un especialista en Bitcoin y en las nuevas tecnologías blockchain. Graduado de la Crypto Academy y minero de Bitcoin desde hace más de un año, ha escrito numerosas masterclass para formar a nuevos inversores en la industria, además de más de 2.000 artículos sobre el sector. Ahora, busca compartir su pasión por las criptomonedas a través de sus artículos en InvestX.
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