Mientras el mercado cripto sigue presionado, Bitcoin, Ethereum y XRP se enfrentan en una batalla crucial. Con salidas masivas de ETF, niveles de soporte débiles y la espera de catalizadores institucionales, los traders están alerta. Descubre los precios clave a seguir hoy según expertos.
El XRP se mantiene con dificultad alrededor de 2,24 dólares después de haber testado un suelo en 2,09 dólares durante las últimas 24 horas. La caída del 15% en siete días y del 25% en un mes sitúa a la altcoin en una posición delicada, pero los datos on-chain muestran que los grandes tenedores están acumulando en estos niveles. El soporte psicológico de los 2,10 dólares constituye un nivel pivote esencial para la tendencia a corto plazo.
El índice de fuerza relativa (RSI) acaba de tocar la zona de los 30, territorio clásico de sobreventa que a menudo precede a rebotes técnicos. El MACD, aunque sigue negativo, comienza a mostrar una convergencia alcista que podría señalar un cambio de momentum en los próximos días. Estas señales técnicas llegan en un momento estratégico, justo antes del lanzamiento anticipado de los primeros ETF XRP.
Las presentaciones regulatorias en Estados Unidos sugieren que varios emisores podrían lanzar sus productos XRP en las próximas semanas. Este catalizador institucional representa un cambio de paradigma para la altcoin. Se beneficiaría entonces del mismo efecto impulsor que Bitcoin y Ethereum tras la aprobación de sus propios ETF. Ripple continúa paralelamente su expansión en pagos transfronterizos y stablecoins, reforzando la utilidad real del token.
Un retorno hacia los 3 dólares parece realista de aquí a finales de noviembre si la presión vendedora se atenúa. El objetivo de los 4 dólares en diciembre sigue siendo posible en un escenario donde los ETF generen flujos de entrada significativos y donde el sentimiento general del mercado mejore.
Bitcoin cotiza actualmente alrededor de 101.686 dólares, registrando una caída del 2% en 24 horas y del 10% en la semana. Los ETF Bitcoin estadounidenses sufrieron 945 millones de dólares en salidas netas la semana pasada, reflejando una marcada aversión al riesgo por parte de los inversores institucionales. Esta presión vendedora se explica en gran parte por la rotación observada en los mercados de acciones, donde los valores tecnológicos de alta valoración sufren tomas de beneficios masivas.
A pesar de este contexto difícil, el rey de las criptos muestra aún una rentabilidad anual del 47%, demostrando la resistencia de su adopción institucional. Los niveles técnicos actuales sugieren que lo peor de la corrección podría haber quedado atrás. El RSI a 30 indica una sobreventa extrema raramente observada en Bitcoin, mientras que el MACD comienza a formar un suelo, señal precursora de una posible reversión.
Las zonas de soporte entre 100.000 y 102.000 dólares concentran importantes volúmenes de compra históricos según los datos on-chain. Si estos niveles resisten ante la volatilidad actual, Bitcoin podría iniciar un rebote técnico hacia 110.000 dólares en las próximas semanas. El escenario de un rally hacia 150.000 dólares en diciembre sigue vigente, impulsado por el efecto Santa Claus históricamente favorable a los activos de riesgo y por el lanzamiento de ETF sobre otras criptomonedas que revitalizaría todo el sector.
Ethereum sufre una corrección del 5% en 24 horas, llevando su precio a 3.297 dólares. La caída alcanza el 17% en siete días y el 27% en un mes, situando a la altcoin en una importante fase de consolidación técnica. Los ETF Ethereum estadounidenses gestionan ahora 34.800 millones de dólares en activos, prueba tangible del creciente interés institucional por la principal blockchain de smart contracts.
Lo que distingue a Ethereum en esta corrección es la emergencia de un nuevo fenómeno. En efecto, varias empresas cotizadas en bolsa comienzan a adquirir ETH como activo de reserva, siguiendo la estrategia pionera de MicroStrategy con Bitcoin. Esta tendencia refuerza los fundamentos a largo plazo y ofrece un colchón de estabilidad ante los movimientos especulativos a corto plazo.
El soporte actual alrededor de 3.200 dólares representa un nivel crítico para los alcistas. Un mantenimiento por encima de esta zona, combinado con la subida progresiva del RSI desde sus niveles de sobreventa, crearía las condiciones para un rebote hacia 4.000 dólares a principios de diciembre. El objetivo de los 5.000 dólares sigue siendo accesible para principios de 2026, especialmente si las actualizaciones de la red continúan mejorando la eficiencia y la adopción institucional se acelera con nuevos productos ETF que potencialmente incluyan staking.
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